LAS PARÁBOLAS
¿Qué es una parábola?
Las parábolas de Jesús son aquellas breves narraciones dichas por Jesús de Nazaret que encierran una educación moral y religiosa, revelando una verdad espiritual de forma comparativa. Es una forma literaria que consiste en un relato figurado del cual, por analogía o semejanza, se deriva una enseñanza es un relato simbólico que tiene un fin didáctico o de aprendizaje.
1.- La parábola del sembrador
salió el sembrador a sembrar. Y al echar la semilla, parte cayó junto al camino y vinieron los pájaros y se la comieron. Parte cayó en terreno rocoso, donde no había mucha tierra y brotó pronto por no ser hondo el suelo; pero al salir el sol, se agostó y se secó porque no tenía raíz. Otra parte cayó entre espinos; crecieron los espinos y la sofocaron. Otra, en cambio, cayó en buena tierra y dio fruto, una parte el ciento, otra el sesenta y otra el treinta. El que tenga oídos, que oiga.
Explicación de la parábola del sembrador
Todo el que oye la palabra del Reino y no entiende, viene el maligno y arrebata lo sembrado en su corazón: esto es lo sembrado junto al camino.
Lo sembrado sobre terreno rocoso es el que oye la palabra, y al punto la recibe con alegría; pero no tiene en sí raíz, sino que es inconstante y, al venir una tribulación o persecución por causa de la palabra, enseguida tropieza y cae.
Lo sembrado entre espinos es el que oye la palabra, pero las preocupaciones de este mundo y la seducción de las riquezas sofocan la palabra y queda estéril.
Por el contrario, lo sembrado en buena tierra es el que oye la palabra y la entiende, y fructifica y produce el ciento, o el sesenta, o el treinta.
2.- La parábola del hijo pródigo
Un hombre tenía dos hijos. El más joven de ellos dijo a su padre: Padre, dame la parte de la herencia que me corresponde. Y les repartió los bienes. No muchos días después, el hijo más joven, reuniéndolo todo, se fue a un país lejano y malgastó allí su fortuna viviendo lujuriosamente. Después de gastar todo, hubo una gran hambre en aquella región y él empezó a pasar necesidad. Fue y se puso a servir a un hombre de aquella región, el cual lo mandó a sus tierras a guardar cerdos; le entraban ganas de saciarse con las algarrobas que comían los cerdos; y nadie se las daba. Recapacitando, se dijo: ¡cuántos jornaleros de mi padre tienen pan abundante mientras yo aquí me muero de hambre! Me levantaré e iré a mi padre y le diré: padre, he pecado contra el Cielo y contra ti; ya no soy digno de ser llamado hijo tuyo; trátame como a uno de tus jornaleros. Y levantándose se puso en camino hacia la casa de su padre.
Cuando aun estaba lejos, lo vio su padre y se compadeció; y corriendo a su encuentro, se le echó al cuello y lo cubrió de besos. Comenzó a decirle el hijo: Padre, he pecado contra el Cielo y contra ti; ya no soy digno de ser llamado hijo tuyo. Pero el padre dijo a sus criados: pronto, sacad el mejor traje y vestidlo; ponedle un anillo en la mano y sandalias en los pies; traed el ternero cebado y matadlo, y vamos a celebrarlo con un banquete; porque este hijo mío estaba muerto y ha vuelto a la vida, estaba perdido y ha sido encontrado. Y se pusieron a celebrarlo.
El hijo mayor estaba en el campo; al volver y acercarse a casa oyó la música y los cantos y, llamando a uno de los criados, le preguntó qué pasaba. Este le dijo: Ha llegado tu hermano, y tu padre ha matado el ternero cebado por haberle recobrado sano. Se indignó y no quería entrar, pero su padre salió a convencerlo. El replicó a su padre: Mira cuántos años hace que te sirvo sin desobedecer ninguna orden tuya, y nunca me has dado ni un cabrito para divertirme con mis amigos. Pero en cuanto ha venido este hijo tuyo que devoró tu fortuna con meretrices, has hecho matar para él el ternero cebado. Pero él respondió: Hijo, tú siempre estás conmigo, y todo lo mío es tuyo; pero había que celebrarlo y alegrarse, porque ese hermano tuyo estaba muerto y ha vuelto a la vida, estaba perdido y ha sido encontrado.
Cuando aun estaba lejos, lo vio su padre y se compadeció; y corriendo a su encuentro, se le echó al cuello y lo cubrió de besos. Comenzó a decirle el hijo: Padre, he pecado contra el Cielo y contra ti; ya no soy digno de ser llamado hijo tuyo. Pero el padre dijo a sus criados: pronto, sacad el mejor traje y vestidlo; ponedle un anillo en la mano y sandalias en los pies; traed el ternero cebado y matadlo, y vamos a celebrarlo con un banquete; porque este hijo mío estaba muerto y ha vuelto a la vida, estaba perdido y ha sido encontrado. Y se pusieron a celebrarlo.
El hijo mayor estaba en el campo; al volver y acercarse a casa oyó la música y los cantos y, llamando a uno de los criados, le preguntó qué pasaba. Este le dijo: Ha llegado tu hermano, y tu padre ha matado el ternero cebado por haberle recobrado sano. Se indignó y no quería entrar, pero su padre salió a convencerlo. El replicó a su padre: Mira cuántos años hace que te sirvo sin desobedecer ninguna orden tuya, y nunca me has dado ni un cabrito para divertirme con mis amigos. Pero en cuanto ha venido este hijo tuyo que devoró tu fortuna con meretrices, has hecho matar para él el ternero cebado. Pero él respondió: Hijo, tú siempre estás conmigo, y todo lo mío es tuyo; pero había que celebrarlo y alegrarse, porque ese hermano tuyo estaba muerto y ha vuelto a la vida, estaba perdido y ha sido encontrado.
Explicación de la parábola del hijo pródigo
El hijo menor: el pecador que se aleja.-
El hijo menor se aleja del Padre e incurre en todo tipo de pecados en un uso alocado de la libertad. El hambre que pasa, vive peor que los animales, la indigna situación en que se halla después de haber malgastado toda su herencia, le hace rectificar y volver al Padre en un camino de vuelta, difícil y doloroso. La actitud del Padre es un desbordarse de cariño, le da el anillo de la reconciliación, es un amor extraordinario.
El hijo mayor.-
El hijo mayor necesita reconciliación. Se puede ver en él el resentimiento al no tener un corazón como el Padre, se lamenta de la vuelta de su hermano. El Padre también es misericordioso con él.
El hijo menor se aleja del Padre e incurre en todo tipo de pecados en un uso alocado de la libertad. El hambre que pasa, vive peor que los animales, la indigna situación en que se halla después de haber malgastado toda su herencia, le hace rectificar y volver al Padre en un camino de vuelta, difícil y doloroso. La actitud del Padre es un desbordarse de cariño, le da el anillo de la reconciliación, es un amor extraordinario.
El hijo mayor.-
El hijo mayor necesita reconciliación. Se puede ver en él el resentimiento al no tener un corazón como el Padre, se lamenta de la vuelta de su hermano. El Padre también es misericordioso con él.
3.- La parábola del buen samaritano
Un hombre bajaba de Jerusalén a Jericó y cayó en manos de unos salteadores que, después de haberle despojado, le cubrieron de heridas y se marcharon, dejándolo medio muerto. Bajaba casualmente por el mismo camino un sacerdote; y, viéndole, pasó de largo. Asimismo, un levita, llegando cerca de aquel lugar, lo vio y pasó de largo. Pero un samaritano que iba de camino llegó hasta él, y al verlo se movió a compasión, y acercándose vendó sus heridas echando en ellas aceite y vino; lo hizo subir sobre su propia cabalgadura, lo condujo a la posada y él mismo lo cuidó. Al día siguiente, sacando dos denarios, se los dio al posadero y le dijo: Cuida de él, y lo que gastes de más te lo daré a mi vuelta. ¿Cuál de estos tres te parece que fue el prójimo de aquel que cayó en manos de los salteadores? El le dijo: El que tuvo misericordia con él. Pues anda, le dijo entonces Jesús, y haz tú lo mismo
Explicación de la parábola del buen samaritano
El sacerdote representa a los que interpretan la ley, pero sin vida y con legalismos. El buen samaritano es el hombre que sabe querer al modo divino, que se olvida de sus ocupaciones, cura, cuida, gasta su dinero, dice que volverá para ver como va la recuperación. En definitiva, vive la misericordia, ése, el que está fuera de la ley, es el que mejor cumple la ley de Dios de amar con misericordia. Jesús es el buen samaritano de los que sufren en este mundo.
Debemos amar a nuestro prójimo, y nuestro prójimo es esa persona cercana que necesita de nuestra ayuda, auxilio, socorro, atención, independientemente de su credo, nacionalidad, raza, etc.
PREGUNTAS
- Explica que es una parábola
- Explica de la parábola del sembrador que significa "lo sembrado entre espinos".
- En la parábola del hijo pródigo explica por qué el padre se desborda de cariño con el hijo menor
- Explica en que consistió la misericordia del buen samaritano
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