martes, 22 de marzo de 2022

LA CONFESIÓN

 LA CONFESIÓN



¿QUÉ ES LA CONFESIÓN?

Es el acto sacramental por el cual Dios nos perdona de nuestros pecados cometidos después del Bautismo (mortales y veniales), <denominado también sacramento de la reconciliación> que realizamos por medio de un sacerdote con facultad de absolver.


COSAS NECESARIAS PARA HACER BIEN LA CONFESIÓN

1.- Exámen de Conciencia.-
El exámen de conciencia es pensar/reflexionar/recordar  todos los pecados cometidos.  

2.- Dolor de los pecados.-
El Dolor de los pecados  es el sentimiento que tenemos de pesar, de malestar, por haber ofendido a Dios con nuestros actos.

3.- Propósito de la enmienda.-
Es esa firme decisión que tenemos para volver a no cometer  los pecados.

4.- Decir los pecados al confesor.-
Desde la humildad y con sinceridad, decir todos los pecados cometidos que recordemos, sin callar por vergüenza ningún pecado mortal o venial.

5.- Cumplir la penitencia.-
Hacer lo que el Sacerdote te haya dicho, con humildad y dolor para reparar la ofensa causada a Dios  y hacerlo  pronto para que no se olvide.


¿CÓMO DEBE DE SER LA CONFESIÓN?

Concisa, clara y concreta.- 
Sin muchas palabras, las precisas y necesarias para decir con delicadeza, humildad y dolor los pecados cometidos, indicando al confesor el tiempo transcurrido desde la última confesión.

Completa e íntegra.- 
Sin dejar de decir aquellos pecados que recordemos, por vergüenza. Hemos de ser sinceros y humildes.


¿CUÁL ES LA FORMA DE CONFESARSE?

  • Nos arrodillamos ante el confesionario, nos santiguamos  y decimos: "Ave María Purísima".
  • El Sacerdote nos contestará: "Sin pecado fue concebida". 
  • A continuación le indicamos de forma aproximada, cuando fue nuestra última confesión y le decimos los pecados cometidos que recordemos.
  • El Sacerdote nos dará unos consejos para ayudarnos a ser mejores y nos dirá la penitencia que hemos de cumplir.
  • Por último, el Sacerdote nos dará la absolución diciendo estas palabras: "Yo te absuelvo de tus pecados, en el nombre del Padre, y del hijo, y del Espíritu Santo", terminado así la confesión.